Lukashenko: Belarús está preparada para cualquier escenario y responderá a una agresión sin vacilar

Belarús está preparada para cualquier escenario y no dudará en responder a una agresión. Lo declaró en una entrevista al canal de televisión Rossiya 1 el Presidente de Belarús, Aleksandr Lukashenko, informa BelTA.

“Nadie luchó nunca contra un país nuclear, un país que posea armas nucleares. Y les digo abiertamente: somos gente pacífica, Belarús ya está harta de guerras. Tenemos un país hermoso, limpio. Los rusos vienen con placer. Pero es el centro de Europa. Ese es nuestro problema. Van allí a través de nosotros, salen de allí a través de nosotros. Por lo tanto, la situación no es fácil y estamos preparados para todo”, afirmó el Presidente.

El Jefe de Estado subrayó que Belarús responderá a cualquier agresión contra ella. “Ya tenemos suficiente poder para responder. Mucha gente dice: “Pues, Batka, ya saben cómo es…” Sí. Soy así cuando se trata de mi pueblo, de mi Estado. No voy a permitir (creábamos aquí, trabajando duro durante un cuarto de siglo, creábamos junto con el pueblo belaruso un Estado independiente) que destrocen a 10 millones. ¿Cuántos rusos están aquí? Unos tres millones más. Son 13 millones, soy responsable de ellos. Por eso no dudaré en caso de una agresión contra nosotros”.

“¿No es una agresión los ataques inesperados en la frontera? ¿No es una agresión un ataque en Machúlischi?”, precisó la periodista.

“No, está lejos de ser una agresión. Podemos y podremos con tales “Machúlischi”. Y también con la frontera. Son provocaciones”, afirmó Aleksandr Lukashenko. Incluso los acontecimientos en la provincia rusa de Bélgorod, según él, están lejos de ser una agresión. “Se trata de una provocación muy tangible y fuerte, donde hay fallos. Pero ahora empezamos a resolverlos. Nos incorporamos a este problema”.

El estadista contó que en los medios de comunicación hay poca información, pero Belarús y Rusia colaboran en esta dirección, reprimiendo diversas amenazas. Por ejemplo, recientemente los servicios especiales identificaron y rastreaban a un saboteador y luego lo detuvieron en Smolensk para no perderlo.